¿Tienes la sensación de que no logras concentrarte mientras lees? Entonces, tal vez debas desarrollar tus habilidades de concentración y comprensión de lectura. Esta habilidad es fundamental para comprender de verdad asuntos de pruebas y trabajos.
Para mejorar tu lectura, primero necesitas identificar los problemas que dificultan esta práctica. Algunos de los problemas más comunes son palabras difíciles, asuntos desconocidos, distracciones y muchos otros. Después de identificar estas dificultades puedes aplicar algunas técnicas para mejorar la habilidad.
Pensando en esto, preparamos una serie de consejos para ayudarte a mejorar la comprensión de lectura. ¡Desliza para abajo y continúa leyendo!
Mejorar la comprensión de lectura es esencial para los estudios y para la preparación de pruebas. Cuando la lectura está bien desarrollada, se convierte en una lectura mucho más fácil de memorizar asuntos y comprender la materia. Además de eso, tener la habilidad de comprender textos ayuda en la resolución de problemas en el día a día
Pero no se trata solamente de leer, para tener una buena comprensión de lectura se necesitan algunas buenas prácticas. Por eso, separamos algunos consejos para ayudarte a desarrollar esa habilidad. Revísalos:
La palabra scanning significa escanear, y esta técnica se trata exactamente de eso: pasear rápidamente por el texto para entender la idea inicial y ver las palabras claves. Este proceso te va a permitir comprender el objetivo del texto para facilitar el entendimiento completo durante la segunda lectura.
No necesitar leer rápido, tómate tu tiempo para leer completamente tus textos. Para una buena comprensión es necesario mucha paciencia. Un texto leído muy rápido, muchas veces se convierte en un texto difícil de entender y eso te puede causar frustración. Por eso, anda con calma, lee tranquilamente y haz las cosas a tu tiempo.
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Un lector interesado tiene muchas más facilidades para comprender el texto durante la lectura. Por eso, lee con frecuencia, busca fuentes, investiga sobre el asunto antes y anota todas las dudas. Practicar la lectura diariamente es esencial para tener buenos resultados. Por eso separa un tiempo todos los días para leer.
Aunque es muy cómodo leer acostado, esa no es una de las mejores opciones para ayudarte en la concentración. Por esto, anda a una mesa y siéntate con la espalda recta. Esto hará que no sientas sueño, aumentes tu concentración y estés más confortable.
Es muy común perderse durante la lectura y de repente darse cuenta de que no prestaste atención en las últimas líneas. Pero volver a leer los parágrafos no es recomendado, ya que eso atrasa la lectura y haces que tu rendimiento disminuya mucho. Entonces, si te pasa esto, solamente sigue leyendo. Probablemente, lo que fue dicho será mencionado nuevamente y podrás conseguir entender el asunto.
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La lectura silenciosa es más productiva y eficaz que la lectura en voz alta. Esto acontece porque el acto de leer es una acción de los ojos y del cerebro, o sea, pronunciar lo que está escrito hará que la comprensión sea más lenta. Además de mejorar el entendimiento del texto, la lectura silenciosa es más rápida.
Ver palabras desconocidas es muy común durante la lectura, principalmente en lecturas que son para estudiar. Por eso un tip muy bueno es leer con un diccionario cerca de ti. Así, cuando tengas alguna duda puedes consultar el significado de la palabra. Además de ayudar a comprender mejor el texto, esta técnica hará con que mejores tu vocabulario.
¿Estás leyendo un texto para estudiar? Entonces aprovecha y haz resúmenes, esta técnica ayuda a absorber mejor el texto y también ayuda mucho a estudiar. Si a ti te gusta escribir, puedes hacer creativos y divertidos mapas mentales para estudiar
Si a ti no te gusta escribir, está todo bien, haz un resumen grabado en audio contando aquello que no entendiste sobre el asunto. Lo bueno de esta estrategia es que siempre que tengas alguna duda puedes volver a ver le resumen para acordarte de la materia.
Hacer preguntas por capítulo (o incluso por parágrafos) te ayudan a mejorar la comprensión del texto. Cuando elaboramos preguntas nos cuestionamos y necesitamos reflexionar para responder. Además de eso, esta técnica ayuda a memorizar el asunto del libro. Esta es una óptima táctica para prepararse para pruebas y trabajos.
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