Independientemente del método de lectura veloz, hay maneras en las que puedes incrementar tus hábitos para leer más libros en menos tiempos y así ya no tener que recurrir a los resúmenes.
Primero que nada, debes llevar un libro a todas partes, siempre. Es el principal consejo.
Ya sea que estés esperando para subir al autobús, en la fila del banco, en la sala del médico, etcétera, todos esos tiempos “muertos” son la oportunidad perfecta para abrir el libro y ponerte a leer. Te recomendamos que consigas ediciones de bolsillo para que sea más sencillo y práctica andarlo cargando a todas partes.
Por otro lado, haz que leer se convierta en una prioridad. Haz conciencia de todo el tiempo perdido al momento de hacer scroll en tus redes sociales. Puedes eliminar esos tiempos muertos o alternar de vez en cuando para agarrar el libro en lugar del celular. Verás que poco a poco irás avanzando.
Ten a la mano varios libros de diferentes géneros. Esto es porque a veces estamos de humor para algo de ficción y otras para algo más ligero como el humor. A veces se antoja algo de divulgación científica o terror. Los estados de ánimo son diferentes y cada uno tiene un libro especial para apreciarlo al momento.
Si no te gusta un libro, no tienes por qué terminarlo. No forces la lectura. Si ya no te gustó un libro, no debes terminar odiándolo, basta con cerrarlo y empezar otro. Si te forzas a terminar los libros, tu lectura se hará más lenta y nuestro estado de ánimo caerá.
También te recomendamos que siempre tengas listo un próximo libro. Suele pasar que termines un libro que te haya impactado y sientas un vacío porque ya no hay más historia de ese libro, por lo tanto, ten ya otro listo para mantener esa emoción de seguir leyendo. Se vale pedir recomendaciones a amigos y familiares.
Por último, lleva la cuenta de cuántos libros has leído. Lo puedes hacer al año y así tratar de romper esa marca para el siguiente. Además de enriquecer tu intelecto, podrás tener la autoridad social de recomendar libros a la gente que te rodea.
Crea el hábito de tener un horario fijo todos los días que sea exclusivo para leer y verás que en poco tiempo tendrás una amplia biblioteca con libros que habrán estimulado tu imaginación.
